21/5/12

Creatividad: 1. Alcanzar lo inalcanzable.



La creatividad está directamente relacionada con las expectativas y con las metas que cada uno de nosotros podamos tener. A mayor expectativa es mayor el índice de creatividad que tendemos a desarrollar ya que, supuestamente, los mayores retos tienen una mayor grado de dificultad y, lógicamente, necesitan un mayor grado de destreza y de habilidades para poder conseguirlo. Así nos lo deja ver Paul Arden que afirma que aspirar a algo que nos supere es uno de los focos más importantes que hace desarrollar la creatividad. ¿Por qué?

Cuando algo nos supera es porque carecemos de las herramientas para poder afrontarlas. ¿Qué hacer? Echar a volar la imaginación es la alternativa. Las situaciones que nos superan nos ponen entre la espada y la pared, a veces entre la vida y la muerte. De acuerdo con la teoría de la evolución, te adaptas o mueres. Para salir de estas situaciones comienzas a ver hacia todos los lados y cualquier cosa o situación te puede dar una idea para salir adelante. Creo que todos nosotros en situaciones de necesidad hemos experimentado situaciones de este tipo, sobre todo si somos capaces de mantener la calma, y de verla como un reto que nos obliga a pensar y a dar respuestas concretas.

Personalmente me he visto en situaciones de presión en las que la misma presión más la calma han dado lugar a momentos de creatividad importantes. No me gusta vivir en la presión, pero sí reconozco que en esos momentos la mente se dispara y busca alternativas importantes.

¿Ponernos grandes retos o vivir el día a día con los pequeños? Yo creo que no tenemos que sentirnos obligados ni por unos ni por otros, pero sí sentirnos alentados por ellos. La consecución de sueños hace que nuestra autoestima y asertividad aumenten. Sentimos que valemos y que somos útiles para los demás y, por supuesto, cuanto mayores sean nuestros retos, menos miedo tendremos, mejor nos sentiremos y nuestro proyecto de autorealización se verá satisfecho.

La cuestión está en si somos personas que tenemos retos o simplemente buscamos una situación de confort que nos mantiene tranquilos aunque no realizados. La seguridad, por lo general, no suele llenarnos del todo, tal vez porque no nos permite crecer más y aspirar a algo más de lo que ya tenemos.