12/8/13

Ampliando perspectivas


¿Sabes que es lo que sale en la imagen? ¿El cerebro? ¿Una hoja? ¿Qué dirías que es? Es una pregunta que hacían en una película que estaban haciendo esta tarde: Soul Surfer, basada en una historia real. Pero bueno, la imagen que ves puede decir muchas cosas, pero una vez que se ve la imagen real la profesora explica que para poder captar la realidad no la podemos ver desde cerca, hay que verla desde perspectivas diferentes. Curiosamente coincidía un poco con lo que leía esta tarde en el libro de "Descubrir la neurodidáctica" de Anna Forés Miravalles y Marta Ligioiz Vázquez en el que muchas veces creemos que el mapa que tenemos en la mente refleja el territorio de la misma vida.

Buscamos seguridades, dicen en el libro, y nos sentamos en el mismo sitio, recorremos las mismas rutas, comemos los mismos platos, vemos el mismo tipo de películas y tendemos, entre otras cosas, a refugiarnos en el mismo tipo de amigos. Buscamos, al igual que los animales, marcar el territorio de tal manera que podamos sentirnos seguros, no excluidos y sin sentirnos amenazados por personas, grupos, valores que nos cuestionen de una u otra manera.

¿Qué pasaría si nos sentamos cada día en un sitio diferente a la hora de comer, hacemos una ruta diferente al salir de casa en dirección al trabajo, cambiamos de autor del libro que leemos o, simplemente, conocemos gente nueva? Posiblemente e damos al cerebro, dicen ellas y concuerdo yo, a que se expanda y vea cosas nuevas que generalmente no vemos por la situación de confort en la que nos sentimos y nos gusta estar. También comenzaríamos a ver "nuevas perspectivas" que amplían nuestra visión e iríamos más allá de ciertos instintos que nos mueven y nos hacen reaccionar de forma un tanto primaria e irracional.

Las palabras, explican ellas, pueden ser dichas en un contexto, entendidas en otro e interpretadas en otro totalmente diferente de tal manera que no ayudan a construir relaciones estables a niveles personales o de trabajo. Los hechos que a veces producen, a simple vista, una negativa a ser aceptados desde nuestra parte, pueden ser vistos también desde nuevas perspectivas si el cerebro está siempre en movimiento y buscando nuevas perspectivas en aquellos sitios que son comunes tanto en la casa, como en el trabajo como en los caminos que recorremos todos los días por nuestra vida.

Lo que simplemente puede ser una parte del cerebro, una hoja puede ser entendido en su contexto si nos alejamos de la perspectiva que tenemos y la analizamos desde un poco más lejos intentando buscar toda la información que podamos conseguir. ¿Nos interesa ser más objetivos o preferimos la seguridad de nuestras ideas, experiencias, creencias o valores al precio de valorar la vida y a los demás desde lo que realmente pueden aportarnos? La foto del inicio simplemente era esta, nos sucede lo mismo en la vida?: